En 1998, gracias al derroche de talento mostrado en los excelentes “Siamese Dream” (1993) y “Mellon Collie And The Infinity Sadness” (1995), en los que parecía que la creatividad musical de Billy Corgan no tuviera límites, este se había convertido en uno de los compositores más respetados del momento en su campo, y en toda una eminencia en el mundo del rock alternativo de la época. Su labor como arreglista estaba muy solicitada, participando en discos tan importantes de aquel año cómo “Mechanical Animals” de Marilyn Manson o “Celebrity Skin” de Hole, tanto como co-compositor, como aportando arreglos o ofreciendo orientación de por dónde creía él que debían ir los tiros en las nuevas canciones de cada banda.
La expectación por escuchar el nuevo material de Smashing Pumpkins era mayúscula. Ya habían dado pistas del nuevo sonido en la canción "The End is the Beginning is the End" que compusieron para la banda sonora de la película "Batman y Robin" del año anterior, en la que si bien aun mantenían la dureza de las guitarras de "Mellon Collie And The Infinite Sadness", ya se podía apreciar una tendencia hacia un estilo más electrónico.
Uno de los factores que marcarían el nuevo disco de un modo evidente fue la expulsión del miembro original y excelente batería Jimmy Chamberlin debido a su adicción a la heroína, cuyo punto culminante fue una sobredosis durante la gira del anterior disco que sufrió junto al teclista de la gira, Jonathan Melvoin, quien murió a causa del accidente. Tras aquello, diferentes baterías reemplazaron su puesto, siendo Matt Walker (Filter, Morrissey) el más representativo por grabar la citada "The End Is The Beginning Is The End" y por ser uno de los percusionistas de mayor peso en el disco "Adore". Chamberlin volvería a ser el batería de la banda para el siguiente álbum, así que de hecho "Adore" es el único disco en el que no participó (ni tampoco en el del pasado 2012, "Oceania", pero es que en realidad en aquel, el único miembro original de la banda era Billy Corgan).
El ansiado "Adore" fue finalmente un disco que manifestaba una inclinación por los nuevos sonidos que ofrecía la electrónica y el rock industrial, pero a su vez supuso una evolución hacia terrenos más sosegados e íntimos, dando como resultado un nuevo excelente trabajo, y el último gran disco de la banda. Quizás no a un nivel tan alto como el de sus dos álbumes anteriores, pero igualmente muy especial y disfrutable.
Hoy nueva entrada conjunta con el blog "Cuando Éramos Alternativos", que una vez más recupera un artículo de la prensa musical especializada de la época.
FOR MARTHA
PUG
TO SHEILA
DAPHNE DESCENDS
ANNIE DOG
ONCE UPON A TIME
TEAR
SHAME
PERFECT
CRESTFALLEN
APPLES + ORANJES
BEHOLD! THE NIGHTMARE
Entrevista junio 1998
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Gracias por dirigir mi atención a este disco. No lo compré en su día y lo he escuchado entero por primera vez este fin de semana. Al escuchar a diario Radio 3 en aquella época y habiendo visto repetidamente sus conciertos en Bilbao y en Los Conciertos de Radio 3 al tenerlos grabados en vídeo, oírlo ha sido como ir desenterrando canciones ocultas en mi cerebro que me gustaban mucho y con las que no había vuelto a tropezar en casi 15 años, como 'Daphne Descends', 'Tear' o 'Once Upon a Time', y a descubrir otras bonitas como 'To Sheila'. Siempre he tenido una relación de amor/odio con la voz de Billy y con su personaje, pero he de reconocer que las canciones que me interesan de The Smashing Pumpkins me ganan de verdad.
ResponderEliminar¡Saludos!
Me alegra que te halla traído buenos recuerdos. Es una lástima que siempre halla sido considerado un disco menor. No es tan ambicioso cómo sus dos anteriores, pero siempre me ha parecido que poseía una atmósfera especial. Lástima que a partir de ahí si que fue de capa caída.
ResponderEliminarTe aviso para cuando prepare la próxima!